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LOTE 50B

Escuela colonial. Charcas. Bolivia. Posible atribución a Cristóbal de Aguilar (Lima, Siglo XVIII)

Estimación
250.000 € / 400.000 €

Remate: 221.000 €

Escuela colonial. Charcas. Bolivia. Posible atribución a Cristóbal de Aguilar (Lima, Siglo XVIII)

"Retrato de la Familia Cornejo Sancho"

Óleo sobre tela. Fechado en 1754.

245 x 317 cm.

Este lote tiene el permiso de exportación del Ministerio de Cultura en vigor.

Se adjunta extenso y muy documentado estudio de la Dra. en historia del Arte Dña. Clara Zamora Meca. En él, menciona la posible atribución al pintor Cristóbal de Aguilar “Es posible su atribución a Cristóbal de Aguilar, retratista que trabajó en Lima en la segunda mitad del siglo XVIII, contemporáneo de Cristóbal de Lozano. Su obra más conocida es en retrato del Virrey Amat, pintado en 1771 para el monasterio de las Nazarenas. La cronología de sus obras conocidas va de 1745 a 1769, algunas son firmadas y otras atribuidas.”

Además, es relevante que Cristóbal Aguilar, fue un pintor especializado en retratar a los miembros de la nobleza limeña y la élite política del Virreinato del Perú. Es lógico suponer que el encargo de una pintura tan importante y realizado por una personalidad de la época, le fuera comisionado a uno de los mejores artistas del momento, por lo que a pesar de no estar firmado (como sucedía en la mayoría de los casos), su paternidad no puede ser anónima.

Se trata de una obra limeña excepcional, de un enorme interés tanto desde el punto de vista histórico, como artístico e iconográfico, y por la interesantísima información que aporta la pintura en sí, reflejando los diferentes estamentos de la sociedad, la advocación mariana que la preside, lo detallado de cada personaje con su información personal y la unión de ambos continentes plasmada en la translación de la familia al nuevo mundo, (gracias a dos de sus integrantes) mediante el encargo de este retrato, como por la información que ha aportado el estudio de la pintura por parte de la Dra. Clara Zamora, que incluye datos extraídos de entre otros del Archivo de Indias, o del Archivo Municipal de Arganda.

Gracias a ello, anexa a su estudio documentos tan interesantes como la licencia de pasajero a Indias de Manuel Cornejo (1711) y cuatro bulas papales que presentan la firma de José Cornejo, dos de Inocencio XIII al rey Felipe V, comunicando la provisión del arzobispado de La Plata (Charcas) y  del arzobispado de Lima (ambas de 1723) y las otras dos de Clemente XI al rey Felipe V, comunicando la provisión de Nueva Segovia (IIocos) y en  Nueva Cáceres (Camarines) ambas situadas en Filipinas.

En este caso, como en otros casos frecuentes, era habitual la realización de retratos post mortem, como leemos en el estudio de La Dra. Zamora “El verdadero auge retratístico se da en este siglo XVIII. El final de la Guerra de Sucesión marcó un punto de inflexión entre el retrato predominantemente de carácter histórico y conmemorativo y el de ostentación, como es el caso que nos ocupa, que fue introduciéndose, fundamentalmente, por la corriente artística francesa. Conforme la élite adquiría títulos de nobleza, sus retratos se enriquecieron decorativamente, aunque todavía su gesto se mantuviese muy severo. El retrato no trataba de reproducir la psicología del retratado, sino manifestar su pertenencia a un grupo social, a una comunidad religiosa o a una corporación. Como en este caso, era habitual que algunos retratos fueran hechos post mortem. Parte de los retratados ya no vivían cuando se pintó esta obra en 1754. 

Respecto a la representación de este peculiar retrato, prosigue Zamora ”Es una composición atípica, una escena con doce personas, que aparecen entre dos estancias palaciegas, en una especie de distribuidor. Corona la escena la Virgen del Sagrario de Toledo. Son varias las relaciones artísticas que constan entre la Catedral de Toledo e Hispanoamérica durante la Edad Moderna. La Virgen del Sagrario gozó de una enorme veneración en Nueva España. Valga como ejemplo la pintura realizada en 1672 por Francisco Rizi para ser enviada a Puebla de los Ángeles (México), a petición de Manuel Miranda Palomeque. La Virgen del Sagrario era considerada “madre y protectora”, tal como también recoge la inscripción que la rodea en el cuadro que nos ocupa. “Bajo tu protección” es el himno más antiguo conservado actualmente de la Virgen María como Madre de Dios. La transcripción del texto que rodea a la virgen en el cuadro es esa misma: MONSTRATE ESSE MATREM SUB TUUM PRESIDIUM CONFUGIMUS”

La composición se adapta a los retratos de élite de la época: retratos en pie, con cuatro elementos imprescindibles: el cortinaje, el escudo heráldico (con corona marquesal en este caso), cartelas con descripciones de los personajes y elementos que aluden a los cargos de los representados (por ejemplo, la mitra de uno de ellos). La pintura colonial fue ejecutada casi siempre sobre tela, con lienzos de dimensiones amplias. Es llamativo el tamaño de esta obra, así como el numeroso conjunto familiar que representa, haciendo de ella una obra de un interés desmesurado. 

Por su parte, Cano Picó y Puig Galindo, escriben respecto al inconfundible aspecto hispanoamericano de la obra “

La pintura tiene todas la características de la pintura de retrato que se desarrolló en Hispanoamérica de época Virreinal o Colonial. Las arquitecturas de fondo de perspectiva irregular tienen todas las característica de una arquitectura colonial de época Virreinal. Otro aspecto de la pintura que se relaciona con Hispanoamérica está en el vestuario, como es el uso de delantales ricamente realizados que complemente una vestimenta de personas de importancia. En España los trajes de damas aristocrática no llevaban delantal como complemento. Mientras que en Hispanoamérica si era frecuente el uso de delantales como complemento de los trajes de señoras de importancia.

La pintura presenta una cartela central con escudo familiar en la parte inferior que reza: “DON MANUEL CORNEJO. / I D. JULIANA SANCHO. / I SUS HIJOS”. Dicho escudo corresponde al de la Familia Cornejo en Arganda del Rey.

En la parte inferior se encuentran diez cartelas con el nombre y títulos que identifican a cada uno de los personaje. A ese respecto, es muy interesante el magnífico trabajo realizado por Ramón Cano Picó y Cristina Puig Galindo, que desarrolla en profundidad cada uno de los personajes.

Respecto a los retratados, como nos ilustra Zamora, “ La familia Sancho Granado fue una familia muy destacada en Arganda del Rey (España). Los Sancho, al unirse con los Granado, consiguieron la fusión definitiva entre este lugar y la Compañía de Jesús. En 1613 fue Juan Sancho, alcalde de la Santa Hermandad, quien capitaneó a un grupo de 27 argandeños, que se opusieron a la venta de la Villa al poderosísimo Duque de Lerma. Este mismo Sancho capitaneó a la Villa de Arganda frente al poder de la Compañía de Jesús” una de las hijas, Juliana Sancho Granado se casa con el médico don Manuel Cornejo, formando la familia Cornejo Sancho, que aparece retratada en esta pintura. 

Dos de los hijos son los que viajaron a la Nueva España, como prosigue Zamora “el licenciado Manuel Cornejo, que aparece en el expediente de información y licencia de pasajero a Indias en el año 1711, con Manuel de la Cruz, natural de Toledo, como comisario superior (Archivo General de Indias, Signatura: CONTRATACION, 5466, N. 1, R. 19. Fecha, 1711-07-28). Siendo éste el personaje que nos sirve de vínculo para entender la trasposición de esta familia a las Indias. Asimismo, el segundo de ellos, Juan Hernando, aparece como “Deán y Canónigo de la Santa Iglesia Metropolitana de Santiago” (Santiago de Chile, pues es así como se la denominaba, que no así la de Santiago de Compostela)

En la conclusión de su estudio, nos deja la Dra. Zamora una frase que queremos destacar: “Una pieza muy peculiar, ambiciosa y rica, que dará mucho que hablar en el futuro, si continuamos investigando el sendero que nos abre a todos los interesados en la historia de la humanidad.”

 

Se adjunta:

- Estudio de la Dra. en historia del Arte Dña. Clara Zamora Meca.

- Informe técnico de Ramón Cano Picó y Cristina Puig Galindo.